En medio de la revisión de los planes estratégicos de empresas como Iberdrola y Naturgy, S&P Global advierte sobre problemas en la capacidad crediticia de las energéticas, afectadas por la necesidad creciente de fondos para la transición energética, lo que está deteriorando los balances y reduciendo el margen de calificación. Esta situación podría conducir a una degradación de la calidad crediticia debido a la volatilidad de los precios de la energía y la presión en los gastos de capital, lo que genera un entorno complejo para el sector.
Desafíos Financieros en el Sector Energético
Las empresas del sector energético que puedan adaptarse a estos desafíos y mantengan una disciplina financiera sólida tendrán mayores posibilidades de preservar su calidad crediticia. Se espera que se incrementen las desinversiones, especialmente en empresas integradas que podrán ajustar sus inversiones en renovables para priorizar las inversiones en redes.
Inversiones y Riesgos
Las inversiones en tecnologías de bajas emisiones, como la energía nuclear y la eólica marina, son costosas y requieren una financiación significativa. Aunque se prevén altos precios del gas y la energía en Europa hasta 2026, existen riesgos asociados a la volatilidad de los precios y a factores como la inflación específica del sector.
Disciplina Financiera y Regulaciones
Para preservar el rating de las redes de gas, es crucial mantener una disciplina financiera para evitar activos varados. En cuanto a las redes eléctricas, las regulaciones y políticas financieras disciplinadas son fundamentales para proteger las métricas crediticias basadas en el flujo de caja, especialmente en países como Países Bajos, Bélgica y Alemania, que podrían necesitar apoyo est