Las comunidades energéticas: más que solo producción y distribución de energía
“Las comunidades energéticas tienen que cumplir una función mucho más amplia que la mera producción, distribución y suministro de energía; es decir, deben incorporar valor social”. Estas palabras de Joan Herrera, exdirector general del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía y actualmente máximo responsable del área de Energía en el municipio de El Prat, resumen la importancia de las comunidades energéticas en la transición energética.
Impulso a las comunidades energéticas en España
Durante la I Cumbre de Comunidades Energéticas de UNEF, celebrada en colaboración con ComEnerSys, se presentaron 14 casos reales de comunidades energéticas en España. Estas comunidades están abriendo camino y aprovechando las oportunidades regulatorias del país para desarrollar modelos eficientes y participativos que contribuyen a mitigar el cambio climático.
Compromiso y estrategia para el futuro energético
La participación de más de 230 profesionales y expertos del sector en la cumbre ha permitido diseñar una “hoja de ruta común” para promover y defender la creación de comunidades energéticas en España. Joan Groizard Payeras, director general del IDAE, señaló que actualmente hay alrededor de 400 comunidades energéticas constituidas en el país, lo que evidencia el progreso en este ámbito.
Durante dos días de intensas sesiones, se abordaron diversas dimensiones relacionadas con la creación de comunidades energéticas, destacando la importancia de declararlas entidades de interés público. Se concluyó la cumbre con la firma de un Manifiesto por 30 comunidades locales, comprometiéndose a promover una transición energética democrática y participativa, así como a defender los derechos y el marco jurídico favorable para estas comunidades.
En resumen, las comunidades energéticas son un pilar fundamental en la transición energética de España, promoviendo la participación ciudadana, la sostenibilidad y el desarrollo energético sostenible en el país.